El gobierno provincial lanzó al mercado esta semana dos bonos para financiar la gestión y buscar algo de oxígeno en las alicaídas cuentas provinciales por el contexto de baja recaudación.
Se trata de los títulos Clase 1 y Clase 2 , dos letras de deuda en pesos a 18 y 36 meses con las que el gobernador Martín Llaryora busca recaudar $ 80 mil millones en el mercado interno.
Además de sostener la caja provincial, el destino de los recursos busca garantizar el cumplimiento de los vencimientos en dólares que tiene la Provincia.
La necesidad de tomar deuda apunta a fortalecer las finanzas de la Provincia ya que se tornó grave la caída de los ingresos por coparticipación, hay un corte total de los envíos no automáticos desde la Nación y se interrumpieron los aportes que por ley debe hacer la Anses a la Caja de Jubilaciones. Además, también se debilitaron notablemente los ingresos propios, tanto los que dependen de la actividad, como Ingresos Brutos y Sellos, como los patrimoniales (Inmobiliario y Automotor).
El aviso de suscripción indica que los títulos de deuda, todos en pesos, se dividirán en dos clases. Los Clase 1 son bonos que devengan intereses a tasa variable (Badlar más el margen que se determine en la licitación). Tienen un vencimiento a los 18 meses y la amortización del capital se realizará en su totalidad al final del período. Los pagos de intereses se efectuarán trimestralmente.
Los títulos Clase 2 tienen una tasa de interés fija que se determinará en la subasta. Tienen un vencimiento a los 36 meses desde la fecha de emisión, con el capital amortizado en dos cuotas: 25% a los 30 meses y el 75% restante al vencimiento. El capital pendiente de amortización será ajustado conforme a la variación del Coeficiente de Estabilización de Referencia (CER).
En ambos casos, los títulos están garantizados por la cesión de los derechos de la Provincia sobre los fondos de coparticipación federal de impuestos.
La subasta pública se llevará a cabo este miércoles 22 de mayo y el Banco de la Provincia de Córdoba actuará como el organizador y colocador principal del programa, publicó el diario La Voz.
Además, otras instituciones financieras como Banco Santander Argentina, Banco Macro, Banco Comafi y Banco Galicia, entre otros, participan como colocadores.
Los títulos de deuda recibieron una calificación de riesgo “A.ar” por Moody’s y FIX.